martes, 23 de octubre de 2012

FORO DE DERECHO POPULAR: Viernes 26 de octubre 14hs. Anfiteatro Raúl Orgaz, Facultad de Derecho. Universidad Nacional de Córdoba.

En este Foro se analizará entre, otros temas, los nuevos problemas que está trayendo al Pueblo Argentino la implementación por parte del gobierno Nacional de un modelo de desarrollo económico eminentemente extractivo y exportador a través de la Mega   Minería  y los Agro negocios, que se completa ahora con la instalación de la multinacional Monsanto en la Provincia de Córdoba.

El modelo actual de Agricultura impuesto en los últimos años, ha tenido distintas denominaciones, Agricultura Industrial, entre otros, lo que no se debe perder de vista es que el modelo productivo actual se enmarca dentro del sistema Capitalista, y como bien fue mencionado por Gustavo Duch, a las cosas hay que llamarlas por su nombre, por lo tanto el sistema imperante es el de “AGRICULTURA CAPITALISTA”.

Se ha hablado mucho del capitalismo, este sistema busca la acumulación de capital a costa de la privatización de los recursos o bienes naturales. Además se toma a los alimentos como una mercancía, “el que paga come”.

Por otro lado, y contraponiéndose a la Agricultura Capitalista tenemos el modelo Campesino de Soberanía Alimentaria, como se menciona estos dos modelos no pueden convivir, ya que son contrapuestos, mientras uno busca la acumulación de capital, el otro es una estrategia para combatir el hambre en el mundo basado en la solidaridad, produciendo alimentos en mímesis con la naturaleza y con las sabidurías campesinas, que es un ejercicio de alianza entre productor y consumidor, que es el derecho de los pueblos a controlar la agricultura y decidir que y como producir.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Acaparamiento de Tierras: Paraguay, la tierra, el campesinado.







El problema central del Paraguay es el de la tierra. En el marco de un proceso permanente y progresivo, las estadísticas disponibles ya mostraban que era el país de América Latina con la más alta concentración de la propiedad de la tierra en manos de unos pocos. En el otro extremo, la gran mayoría de la población campesina carece de ella.-
Además, es por todos aceptado, aunque las conclusiones que se sacan de ello son ciertamente disimiles, que la absoluta mayoría, sino la totalidad, de los grandes latifundios paraguayos son producto de la apropiación ilegítima e ilegal de tierras de la nación por particulares. Proceso que comenzó apenas terminada la guerra de la Triple Infamia y que no se ha detenido hasta hoy.-
Las luchas del campesinado paraguayo para defender ese patrimonio del avance de la apropiación capitalista concentrada hicieron que el concepto de Reforma Agraria, como herramienta legal contra el latifundio y para garantizar el acceso permanente a la tierra para la mayoritaria población campesina, se instalara legal e incluso constitucionalmente.-   Sin embargo, se calcula que, sólo durante la (larga) dictadura stronista, 12 millones de hectáreas se convirtieron en “tierras malhabidas”.-
Entre otras formas espurias que adopta ese proceso en las últimas décadas está la “venta de derecheras”, es decir la adquisición ilegal por parte de empresas, inversionistas o “colonos”, de los derechos que los campesinos pobres poseen sobre las tierras que usufructúan. Este allanamiento de los beneficiarios legítimos de la Reforma a tal cesión se obtiene por presiones, no siempre meramente en términos de violencia económica, sino en muchos casos abiertamente de violencia física.-
Una forma común, a caballo entre estas dos, consiste en la fumigación de los campos sojeros que paulatinamente rodean las tierras del pequeño campesino, con herbicidas que terminan arruinando los cultivos de este y, consecuentemente, su sustento.-
Todas estas, como se dijo, son realidades cotidianas y conocidas por todos en Paraguay, la cuestión es qué actitud o, mejor, qué partido se toma ante ellas.-


Lugo.
Tal vez no sea tan ampliamente aceptado, aunque no es menos verdad, que el ex obispo Lugo sólo pudo quebrar los largos años de dominación del partido “colorado” (con dictadura o con “democracia”) en las elecciones del 2008, porque su candidatura coincidió y confluyó con una muy fuerte ola de luchas campesinas, una ofensiva de las más fuertes llevadas adelante por el campesinado desde la caída de la dictadura.-    Insistimos en ello, Lugo no habría podido acceder a la presidencia del Paraguay si no hubiera sido impulsado por una formidable ola de luchas populares, principalmente del campesinado.-
La propia alianza inicial que impulsó su candidatura la realizó con un grupo de organizaciones de ese origen, a partir de la relación que había construido desde su lugar de obispo de la iglesia católica en una de las zonas centrales y emblemáticas de las luchas por la tierra.
Así, en una entrevista del 2007 con Heinz Dieterich para Rebelión, el entonces “candidato presidencial del Movimiento Tejojoyá” declaraba: “Si queremos tener una paz social tenemos que pasar por una reforma agraria integral y las tierras mal habidas tienen que pasar a manos de sus legítimos dueños”.-
Por su parte, el mencionado Movimiento Popular Tekojojá, base inicial de esa candidatura, en sus Ejes Programáticos, sostenía: “Será eje importante del nuevo modelo económico, una revolución agraria que consistirá en impulsar cambios en la estructura de propiedad para eliminar los latifundios y facilitar el acceso de la tierra a quien la trabaja, la superación del monocultivo por la vía de la diversificación productiva, y con los métodos de producción sustentable, que deje para el pasado la vulnerabilidad del sector; la promoción de esquemas productivos que preserven la vida de la población, el territorio, el agua y el aire, la diversidad biológica y cultural”.-
Como ejemplo de lo que ocurrió, mencionemos que a principios de 2007 la figura de Lugo competía, con cierta desventaja, con la del ex general Oviedo en las intenciones de voto de las zonas rurales, aunque ya se afianzaba en las ciudades; sin embargo, cuando llegaron las elecciones el voto del campesinado se había volcado mayoritariamente hacia su figura y resultó decisivo.-
Ahora bien, en la misma entrevista, luego del punto, Lugo continuaba: “Pero, aquí la oligarquía terrateniente tiene un poder tremendo”. Y ante la pregunta: ¿Y tú te atreverías?, mostraba una de sus características “definiciones”: “Yo creo que sí”.-
Este Lugo dubitativo es el que ejerció la Presidencia en el Paraguay y así actuó permanentemente.-
Pues bien: no. No se atrevió. Como tampoco se atrevieron sus aliados de Tekojojá ni ninguno de los que fue adquiriendo a lo largo de su camino a la presidencia.-
Y no sólo no se atrevió: a poco de comenzar su gobierno declaró que la Reforma Agraria era cosa del futuro, del lejano futuro.-
Maniobró y “cooptó” para desarmar y desactivar el gran movimiento de masas que avanzaba con el campesinado.-    Gestionó cuatro años de “crecimiento económico” de la mano del reinado despótico de la soja transgénica.-   Dejó intacta la estructura de la propiedad de la tierra y tantos campesinos sin tierra como cuando asumió.-   Mantuvo incólumes e incluso fortaleció los aparatos políticos, judiciales y represivos que custodian el saqueo, el robo de tierras, la violencia asesina e impune de los cuerpos de “seguridad privada” de los latifundistas que permanentemente ejecutan campesinos.-   Fortaleció los históricos vínculos oficiales de las fuerzas represivas policiales y judiciales con el poder genocida del estado colombiano.-   Sostuvo todos y cada unos de los “programas de ayuda y asistencia” de los EEUU en territorio paraguayo, incluidos la USAID y el Plan Umbral, que son amos y señores de buena parte de los programas que llevan adelante ministerios como el de Justicia, poderes como el Judicial o el Ministerio Público o las múltiples ONG’s que pululan a su pródiga sombra.-
 Declaró dos veces el Estado de Excepción (de Sitio) al sólo efecto de permitir al Ejército operar abiertamente en las zonas campesinas conflictivas, anunció su intención de modificar la legislación para poder hacer esto último sin necesidad de declarar la Excepción y mantuvo todos los puestos y destacamentos militares que custodian las estancias y los campos sojeros en el interior del territorio paraguayo.- Impulsó y promulgó la “Ley antiterrorista”, (igual que acá en la Argentina), es decir la conocida ley-formulario que impone el imperialismo vía GAFI, cuando durante su campaña política había obtenido prestigio y renombre justamente durante las movilizaciones populares que habían impedido su puesta en vigencia con anterioridad.- 
Traicionó, entre otros, a 6 dirigentes campesinos que habían contribuido, en algunos casos directamente, a los primeros pasos políticos del entonces Monseñor, permitiendo su extradición desde Argentina y entregándolos a una condena “cantada” y amañada, que resultó de 35 años.-    Esto obviamente con la complicidad activa del Gobierno Argentino que no dudó en entregarlos a la Justicia facista paraguaya.-
Siendo administrador de este orden de cosas, aceptó la responsabilidad en general de la represión que, con numerosas víctimas fatales, cientos  de detenidos y procesados y decenas de presos políticos populares, en diversas ocasiones se descargó sobre las luchas sociales y políticas y, en particular, por la respuesta policial y militar a la consolidación de la existencia del EPP (Ejército del Pueblo Paraguayo) que tuvo sus puntos más oscuros en las más o menos abiertas ejecuciones de dos de sus miembros y de un tercer militante al que se le atribuyó pertenencia al mismo (esto sin mencionar la ejecución de un joven sordomudo al que se tomó por miembro del EPP y por el que se pretendió la impunidad que esa pertenencia supondría).
Etc., etc., etc.


El desenlace del interregno luguista.
El penúltimo jalón de tan destacada administración fueron los sucesos de Curuguaty.-   Sucedió que Lugo y sus aliados creyeron que lo más astuto para sus aspiraciones electorales para el año próximo era contribuir a recrear el escenario de avance de las luchas campesinas, que durante su gobierno como dijimos habían desactivado. Si bien las luchas y la combatividad permanecen, ellos hicieron bien su trabajo: la situación ya no es de avance, sino de resistencia y dispersión.- 
Los verdaderos dueños del Paraguay advirtieron la maniobra y respondieron montando provocaciones operadas por jueces y fiscales, contra los sectores más combativos del los “sintierra”, campesinos organizados para la recuperación de tierras “mal habidas”. El gobierno alcanzó a desmontar una primera, en la zona de Ñacunday, Alto Paraná, pero fue inoperante ante la de Curuguaty, Canindeyú. Allí, cediendo al pedido de un juez que decidió un “allanamiento”, fueron enviados cientos de policías, encabezados por sus tropas de elite, y la resistencia de los campesinos que defendieron su asentamiento y su propia integridad física de la soberbia prepotencia de elite, culminó con un tiroteo tan desparejo en potencia de fuego como en víctimas: 11 muertos campesinos y 6 policías, entre ellos dos de los jefes de la fuerza especial. Como se puede apreciar por las filmaciones, el enfrentamiento también fue desparejo en coraje, en desmedro de la dignidad policial.
El último jalón del ex obispo fue reconocerse como ex presidente. Los sucesos de Curuguaty y las vergonzosas “soluciones” de Lugo (entregarle el mando de las fuerzas de “seguridad” a un político “colorado” el Dr. Candia Amarilla, que venía de ser jefe de los fiscales paraguayos durante 6 años e infinitas tropelías y violaciones de los Derechos Humanos, con lo cual además “ofendió” a sus aliados del Partido Liberal y lo dejó inerme ante el golpe parlamentario; derogar una resolución sobre el funcionamiento policial que incomodaba a la derecha represiva; condolerse de los policías pero no de los campesinos, etc.) allanaron el camino para que una de las bandas políticas que medran en el Paraguay se hiciera del gobierno y, en particular, para que el sistema bipartidario se desembarazara de un intruso, si bien dócil, exasperante.-
Lugo traicionó en esta oportunidad a sus deberes constitucionales y, si eventualmente sintiera algún compromiso hacia ellos, a sus mandatarios (votantes).-  Se allanó a un golpe “institucional”, farsa de juicio político que solamente no avergüenza a la clase política paraguaya, que perdió la vergüenza hace mucho y nunca la volvió a encontrar.-


Perspectivas.
Las direcciones naturales del campesinado paraguayo, clase decisiva y preponderante en el destino del querido y desdichado pueblo hermano, han demostrado tanto defección como incapacidad para estar a la altura de las circunstancias.-
Una parte importante se dejó “cooptar”, es decir canjeó por prebendas personales, grupales o sectoriales, las tareas estratégicas de profundización de la lucha y organización que requería la etapa de ascenso previa al triunfo electoral del luguismo.-  Contribuyó decisivamente a la desmovilización, a la dispersión, a la pasividad del campesinado que se evidenciaría (potenciada por la desmoralización política que transmitía la cúpula luguista) en las jornadas destituyentes.-
Otra parte, más consecuente, no supo escapar a la lógica dispersiva que impone la preponderancia de la lucha reivindicativa sobre la política; no se decidió a pasar enérgicamente a la acción para, en primer lugar, sentar las únicas bases que hubieran podido detener el contragolpe de las estructuras del régimen y del sistema de dominación: la lucha abierta y de permanente movilización del campesinado presionando sobre los centros del poder político (se mostró en las últimas horas que el único temor de los políticos y sus secuaces era el avance del campesinado hacia Asunción, temor rápidamente desvirtuado).-
La situación no fue novedosa en la experiencia de las luchas populares de Nuestra América. Es aquella que evidenciara un alto dirigente de un partido de izquierda con gran ascendiente de masas al analizar el momento del golpe de 1973 en Uruguay.-  Él argumentaba, con mucha razón, que erraban quienes criticaban a su partido por no haber llamado a una insurrección de los trabajadores y el pueblo contra el golpe: “hacerlo era llevar al pueblo a la masacre”, decía sensatamente.-     Lo que omitía era que la responsabilidad de los que se dicen revolucionarios o aun de los que pretenden ser conducción política honesta del pueblo es prever y preparar.-   Prever los movimientos del enemigo, el desarrollo de los acontecimientos; y preparar la única herramienta de victoria contra esas maquinaciones: el pueblo conciente, movilizado, luchando, organizado tras sus vanguardias, sus dirigencias, sus cuadros.-
Pero si se prefiere mentirle al Pueblo, desmovilizarlo, desarmarlo, llevarlo por los atajos (sencillos, pacíficos, negociados, mágicos) que prometen los “operadores” de la política del régimen, después, claro, no se le puede pedir al Pueblo que riegue con su sangre el camino de la derrota que ellos construyeron mientras, distraídamente, administraban “el estado de cosas”, el sistema de saqueo de nuestras riquezas, los regímenes de gestión política de los mismos.-
Mientras tanto, mientras los revolucionarios, los verdaderos patriotas, asumen estas tareas y los posibilistas administran, la lucha de resistencia de nuestros pueblos, del heroico pueblo Paraguayo y de su heroico campesinado, continua infatigable y fatal.-
Allí está la última trinchera del Paraguay, allí están nuestras esperanzas.-


Fuente:  http://www.convocatoriaclns.blogspot.com.ar/

jueves, 11 de octubre de 2012

Miguel Galván, miembro del MOCASE-VC fue asesinado de una puñalada en la yugular

Desde la Unión Latinoamericana de Técnicos Rurales y Agrarios nuevamente tenemos que repudiar un hecho gravísimo ya que en la provincia de Santiago del Estero siguen matando campesinos como sucedió un año atrás con el compañero Cristian Ferreyra.
Repudiamos el asesinato del compañero Miguel Galván en manos de sicarios enviados por empresarios apañados tanto por el Gobierno Provincial, en manos de Gerardo Zamora, como del Gobierno Nacional, también responsabilizamos al Poder Judicial por la demora en la resolución de estos casos, lo que habilita la impunidad para estas lacras del capitalismo.
Exigimos tanto a las autoridades Provinciales y Nacionales, como al Poder Judicial la pronta resolución de estos casos, y que se encarcelen a los responsables políticos y materiales de estos hechos para terminar con la impunidad.

JUICIO Y CASTIGO A LOS CULPABLES MATERIALES Y POLITICOS

BASTA DE MUERTE A CAMPESINOS Y LUCHADORES POPULARES.

LA TIERRA ES DE LOS QUE LA TRABAJAN

POR UN MODELO PRODUCTIVO SUSTENTABLE QUE TENGA COMO SUJETO AL TRABAJADOR CAMPESINO.

ULTERA Argentina.



Miguel Galván, miembro del MOCASE-VC fue asesinado de una puñalada en la yugular por Paulino Riso en el Paraje Simbol, al norte de Santiago del Estero


Alrededor de las 14:20hs Paulino Riso sicario de Figueroa, empresario de Salta fue a la casa de la familia Galván a provocar como tantas otras veces, sólo que esta vez con la intención de matar.
Familias del paraje Simbol venían siendo hostigadas por sicarios de la Empresa Agropecuaria LAPAZ S.A. de Rosario al Frontera (Salta), quien pretende alambrar parte del territorio de las comunidades indígenas Lule Vilela, quienes el pasado 15 de septiembre han realizado la primera etapa del relevamiento territorial.

Miguel y Rafael Galván, en diversas oportunidades han denunciado ante la policía de Monte Quemado las amenazas de muerte y golpizas que Paulino Riso, Hortencia Valderrama y su marido Eulogio Rizo patrón les venían haciendo.
Este hecho denunciado en distintos ámbitos judiciales y ejecutivo: en la policía, en la dirección de bosque por la tala indiscriminada de estos empresarios, ante el Juez Torrelio de Monte Quemado, y ante el Comité de Crisis quienes hace 15 días constataron la gravedad de los sucesos contra las familias por parte de empresarios y bandas armadas comandadas por Tala Aranda.

El gobernador Gerardo Zamora, una vez más es responsable de la  muerte de un campesino indígena, como lo fue la de Cristian Ferreyra asesinado el pasado 16 de noviembre.

Echamos señales a todos lados, todo el tiempo, advirtiendo lo que pasaría sino actúan quienes corresponden desarmar las bandas armadas, guardias blancas de empresarios como Enrique Pagola, Lopresti del Quebrachal, Safir Saa, Carlos Cejas, Raúl Micoli y otros que arrebatan tierras y la vida de nuestros compañeros.
Son conscientes de sus responsabilidades políticas los funcionarios santiagueños inoperantes y cómplices de estos asesinatos de los guardianes de la producción campesina indígena.

Exigimos juicio y castigo para los responsables materiales, ideológicos y políticos del asesinato de Miguel Galván.
Exigimos aprobación URGENTE  de la Ley Contra los Desalojos de campesinos.

Convocamos a todas las organizaciones sociales a concentrarnos para mañana jueves 11 de octubre a las 13hs frente al congreso, para repudiar los asesinatos de los campesinos en defensa de sus tierras y aprobación de la ley Cristian Ferreyra que fuera presentada hace un año al congreso nacional.


¡Miguel Galván y Cristian Ferreyra Viven, la lucha sigue!
0385 155187809     Adolfo
03844 15515850     Angel
011 1558811088     Cariló
03844 15408668     Deo

Fuente: MNCI.

lunes, 8 de octubre de 2012

Alto Paraná aplicó más de un millón de kilos de glifosato en diez años




El ingeniero forestal Julio Bernio, -docente de la Facultad de Ciencias Forestal, investigador y exprestador de servicios de APSA-, denunció que solo entre 1996 y el 2006, Alto Paraná “aplicó un millón ocho mil kilos de glifosato en sus plantaciones de pinos, a los que hay que sumarle los otros agrotóxicos que utilizan en un poderoso cóctel”.
Bernio, a través de su empresa, le brindó servicios de investigación aplicada y protocolos a la multinacional. Dejó de prestarlos luego de denunciar el uso de estos contaminantes y ante una decisión personal ante el hecho.
“Ellos no adquieren agrotóxicos porque tienen una sociedad anónima propia, que se llama Bioforest SA e integra el grupo Arauca, y se proveen a sí mismos. Sin dudas hoy siguen utilizando agrotóxicos, porque si uno viene por la ruta Nacional 12 donde hay plantación de dos años, se puede ver la aplicación”, dijo el profesional en Radio Libertad de Posadas.
Describió que Alto Paraná los “usa en la pre y postplantación, o sea del primero al tercer año del árbol. Aplican un poderoso cóctel compuesto por distintos herbicidas, un pre-emergente que forma una película sobre el suelo, que mata a las plantas apenas germina la semilla, y un detergente como coayudante”.
“Además hay que tener en cuenta la contaminación directa con agrotóxicos, ya que estos se disuelven en 200 litros de agua por hectárea, y el líquido lo toman de arroyos y nacientes. Se hacen como mínimo, dos aplicaciones por año, en las 15 mil hectáreas que tienen con plantaciones de uno a tres años”.

Prohibido decir agrotóxico

Bernio agregó que “en la empresa nos prohibían que digamos agrotóxicos, y teníamos que referirnos a los mismos como agroquímicos. No tenemos que engañarnos, acá la cuestión pasa por la salud de la gente y el derecho que todos tenemos de hacer uso correcto de los recursos naturales, no podemos hacer lo que queremos en una, diez o miles de hectáreas”.
El investigador contó que la contaminación “en Misiones se complica por las lluvias torrenciales y suelo quebrado. Llueve, lava todo el suelo, y eso va a parar a los arroyos. El 80 por ciento de las ciudades de la provincia toman el agua de los arroyos para potabilizarla y todos los componentes químicos van a parar ahí”. Bernio dijo que en el 2006, “en una audiencia pública realizada en Eldorado donde APSA buscaba certificar sus prácticas, denunciamos que Alto Paraná ocultaba información. Les dije que utilizaban un kilo y medio de Randap por hectárea, pero la respuesta fue patética: nos contestaron que antes utilizaban dos kilos y medio”.

Tala rasa en Gruta India

El ingeniero Bernio denunció además, que Alto Paraná violó una de las leyes de conservación del medio ambiente. “Yo pude ver, y lo ve cualquiera, que en la zona de Gruta India, hay una violación clara a la Ley de Bosques Protectores. Aparentemente es una propiedad que ellos compraron a terceros y tenía pinos, pero hicieron tala rasa. No dejaron a ambas márgenes del arroyo el doble o el triple de su ancho, en masa boscosa. Es absolutamente comprobable lo que digo y las leyes ambientales son bien claras”.

Fuente:  http://www.misionesonline.net


miércoles, 3 de octubre de 2012

10 motivos para luchar contra el proyecto de ley que pretende privatizar las semillas en la Argentina


Sectores del Agronegocio, de las transnacionales, asi como el Ministro de agricultura y otros funcionarios, vienen trabajando sobre un nuevo proyecto de Ley de semillas. Segun los borradores que se conocen y por las declaraciones publicas, el mismo busca subordinar la politica nacional de semillas a las exigencias de la UPOV y las transnacionales.
Las consecuencias las sufriran los campesinos y agricutores familiares, pero tambien el pueblo argentino, ya que golperá sobre el mercado interno de alimentos.
Podemos afrimar que:

1.      La ley propuesta no protege los conocimientos ni la biodiversidad; sólo fomenta la privatización y protege la propiedad sobre lo que es un patrimonio colectivo de los pueblos, especialmente de las comunidades campesinas y los pueblos indígenas. De esta forma expande un principio inaceptable, el de que es posible y aceptable privatizar los conocimientos y diversas formas de vida La ley es parte de un conjunto de normas e iniciativas políticas que fomentan la privatización de los conocimientos y de las formas de vida, como las leyes de patentes, la privatización de los sistema de investigación, la privatización de la educación, etc. Este tipo de normas concentra un poder creciente en manos de unas pocas empresas transnacionales, expropia y privatiza el patrimonio biológico nacional, arruina los sistemas nacionales de investigación, dificulta el intercambio de información -fundamento del avance científico-, agrede e impide el normal desarrollo de las formas campesinas e indígenas de relacionarse y hacer agricultura, y violenta principios éticos fundamentales, como es el libre acceso al conocimiento. Al permitir la privatización de las semillas, esta ley y su antecesora además ponen el lucro por sobre el derecho fundamental a la alimentación.

2.      Abre las puertas para que se profundice la expropiación y privatización de la biodiversidad agrícola y silvestre de Argentina. El proyecto de ley hace posible la mayor privatización de los recursos genéticos y de la biodiversidad nativa de Argentina al expandir los llamados derechos de obtentor sobre las especies vegetales. Al aplicarse la ley a todas las especies vegetales, el proyecto permite que toda especie nativa pueda transformarse en propiedad de empresas nacionales o extranjeras. Lo único que se requerirá es hacer un trabajo simple de selección para lograr una población o grupo de plantas relativamente homogéneas. Adicionalmente, el proyecto de ley facilita que cualquier empresa se apropie de las variedades campesinas e indígenas, al considerar como “nuevo” cualquier variedad que no haya sido comercializada ampliamente o inscrita en registros de propiedad intelectual.

3.      Ilegaliza o restringe gravemente prácticas que han estado en vigencia desde los inicios de la agricultura, como es el seleccionar, mejorar, obtener, guardar, multiplicar e intercambiar semilla libremente a partir de la cosecha anterior. Esta práctica es un derecho fundamental de los agricultores y agricultoras del mundo -incluso reconocida por el Tratado de Recursos Fitogenéticos de la FAO- que además fue central en crear la diversidad y riqueza genética utilizadas por las mismas empresas semilleras que buscan hoy prohibir aquella práctica. El proyecto de ley impedirá que las comunidades campesinas e indígenas experimenten, mejoren e intercambien libremente las semillas, proceso a través del cual generaron toda la diversidad que hoy sustenta a la agricultura. Peor aún, la combinación de esta ley con la ley de patentes hará posible que los agricultores cuyas variedades hayan sido contaminadas por cultivos transgénicos sean penalizados y sus variedades sean confiscadas. Se crea así una clásica situación del ladrón detrás del juez.
De esta manera, el proyecto de ley entra en conflicto con el Tratado de Recursos Genéticos de la FAO, del que Argentina es signatario.

4.      Fortalece las condiciones para que se profundice la introducción de nuevos cultivos transgénicos y su expansión, al otorgar propiedad sobre variedades sin exigir prueba efectiva de mejoramiento y en base a la simple expresión de un carácter. La definición de los requisitos para otorgar propiedad no exige que una variedad sea efectivamente mejor que las ya existentes, ni siquiera exige que sea útil o inocua. Al definir que basta la diferenciación de un carácter, facilita significativamente la práctica común de las empresas biotecnológicas de utilizar variedades antiguas para adicionar transgenes o genes cosméticos (sin valor productivo, pero capaces de provocar una diferencia visible) y luego registrarlas como “nuevas”. La no exigencia de mejorías comprobables o de inocuidad facilita además la introducción de cultivos tóxicos.

5.      Crea condiciones para expandir la presencia de empresas semilleras transnacionales en el país, en desmedro del desarrollo nacional de variedades vegetales. La experiencia mundial ha demostrado que las leyes de propiedad industrial sobre las plantas han provocado un proceso de concentración extrema de la producción de semillas a nivel mundial, restringiendo así el acceso a nuevas variedades. Al no permitir el libre uso de las variedades existentes para crear nuevas variedades -base de los grandes avances en mejoramiento genético- la nueva ley hace muy difícil el ingreso de nuevos actores a los procesos de mejoramiento genético, reduciendo así la oferta tecnológica.

6.      Al otorgar poderes monopólicos sobre las semillas, dificultar los procesos de mejoramiento genético independiente, impedir que los agricultores produzcan sus propias semillas y facilitar los procesos de concentración de las empresas semilleras, provocará inevitablemente el alza de los precios de las semillas, encareciendo la producción agrícola en general y la de alimentos en particular. El proyecto de ley crea las condiciones para un control monopólico del primer eslabón (las semillas) de la cadena de producción de los alimentos, quedando gran parte de la población expuesta a esta vulnerabilidad. Esta situación a la fecha no ha sido posible debido a que la producción de semillas se encuentra en manos de muchos y muchas agricultoras.

7.      Otorga a las empresas semilleras el “poder de policía”, ya que deja en sus manos el asegurar que las disposiciones de la ley se observen adecuadamente. Es conocido que empresas como Monsanto y Syngenta han creado verdaderos cuerpos policiales para controlar que los agricultores y campesinos no utilicen lo que ellos consideran su propiedad. Se violan así incluso normas fundamentales del país, como el que los cuerpos policiales están bajo el control y mando del Estado y los poderes fiscalizadores dependen o son supervisados por éste. Es inadmisible la privatización del poder de policía.

8.      Permite el decomiso y embargo de los cultivos y cosechas de quienes sean acusados de no cumplir con la ley. Esto se puede traducir en la destrucción de cultivos y plantaciones frutales, en el decomiso de productos ya a la venta, e incluso en el embargo de exportaciones argentinas. La ley facilita demandas sin fundamento y limita el derecho a defensa de los demandados.

9.      El proceso de negociación de la ley está viciado de secretismo y sectarismo al ser llevado adelante a puertas cerradas y únicamente con la participación de sectores corporativos, sin darse a conocer al público el borrador que se está discutiendo ni posibilitar la participación de toda la sociedad en el debate. Una nueva Ley de Semillas de estas características afectará al conjunto de la sociedad. Impedir su debate público es un atentado a los derechos humanos de todo el pueblo argentino. Negar la información sobre el Proyecto, como ha hecho el CONASE a las organizaciones que lo han solicitado (no respondiendo el pedido) demuestra que no existe intención alguna de abrir las puertas al debate.

10.  El anuncio de la modificación de la Ley hecho simultáneamente con la aprobación de la soja rr2 de Monsanto confirma quien es el principal beneficiario de este Proyecto. La anunciada “Alianza Estratégica” con Monsanto tiene a la modificación de la Ley de Semillas como uno de sus pilares. De hecho, la mayor corporación biotecnológica del mundo ha expresado este reclamo desde comienzos del Siglo 20 exigiendo que Argentina le garantice la “seguridad jurídica” para introducir nuevos transgénicos.

Hacemos un llamado a Rechazar un proyecto de ley que atenta gravemente contra el conjunto de los habitantes de nuestro país. La agricultura tiene un carácter eminentemente social, puesto que tiene la función de sustentar y alimentar a toda la población. Poner en riesgo la seguridad y soberanía alimentaria de Argentina a través de la concesión de nuevos privilegios para las empresas transnacionales que están en el negocio agrícola es avanzar por el camino de la pérdida de soberanía para nuestro pueblo.

·         NO A LA PRIVATIZACIÓN DE LAS SEMILLAS Y LA VIDA
·         FUERA MONSANTO Y LAS CORPORACIONES DEL AGRONEGOCIO DE AMÉRICA LATINA
·         POR UNA AGRICULTURA PARA ALIMENTAR Y EN MANOS DE LOS PUEBLOS

Organizaciones firmantes:
Movimiento Nacional Campesino Indígena
CLOC - Vía Campesina Argentina
GRAIN
Amigos de la Tierra
Acción por la Biodiversidad
            Unión Latinoamericana de Técnicos Rurales y Agrarios (ULTERA Argentina).

Enviá tu adhesión a: carlos@grain.org  o secretaria.mnci@gmail.com 

Fuente: http://www.biodiversidadla.org/Principal/Secciones/Campanas_y_Acciones/%21NO_a_la_privatizacion_de_las_semillas_en_Argentina%21_Firma_la_Declaracion